martes, 4 de septiembre de 2007

Atún con Salsa de Soja y Sal de Naranja

Cómo preparar la Sal de Naranja
Puedes usar la sal marina fina de toda la vida, pero si usas sal gorda mejor.
Lo primero que hay que hacer poner en un mortero un poco de sal, y a continuación añadimos un poco de ralladura de la piel de una naranja. ¿Cuánto? Pues una cucharadita de ralladura por cada dos cucharadas grandes de sal.
Una vez que tengas la ralladura con la sal, la machacamos y mezclamos bien. Al final la sal quedará de color naranja y algo húmeda. Para solucionar esto, la introducimos sobre un poco de papel de aluminio y la metemos al horno a temperatura o muy suavecita, el tiempo suficiente para secar la sal, sin llegar a quemarla, así que ojo.
Cuando esté seca, tal vez queden trocitos como piedrecitas, basta con romperlos con las manos a fin de conseguir la textura original de la sal. Quedando finalmente una sal con el olorcillo, color y un toque al paladar de naranja.
La sal puede guardarse en un tarrito sin problemas pues aguanta mucho tiempo.

Ingredientes:

- Sal de Naranja.

- Salsa de Soja.

- Atún fresco en una pieza o en filetes (tipo solomillo).

- Cebollino picado.

Preparando el plato:

  • El atún lo podemos tener en filetes (como un solomillo) o en un trozo grande al que luego partiremos una vez hecho.
  • El atún tiene que estar macerado en la salsa de soja, por lo que cuanto más tiempo lo tengas así mejor. Lo ideal es que lo tengas de la noche antes en el frigorífico en una bolsa de esas para congelados y con la salsa de soja (de forma abundante) dentro.

Para preparar el plato necesitamos una plancha que pondremos a precalentar y con apenas una gotitas de aceite. Ahora ponemos el atún en la plancha y lo hacemos vuelta y vuelta, como si fuera un solomillo, con la salvedad de recordar que cuando se hace pescado siempre es mejor que quede algo crudo que demasiado hecho.

Si tenías la pieza de atún en lonchas directamente al plato, sino, una vez hecho es el momento de cortarlo en piezas para enplatarlo. Cuando esté en el plato, se le añade un poquitín de cebollino picado y algo de sal de naranja, pero recuerda que la salsa de soja ya de por sí es bastante salada, así que no abusar de la sal. Lo mejor en estos casos es añadirle un poquitín, y si vemos que puede quedar algo soso o algún comensal prefiere las cosas saladas, mejor ponerlo en un platito y dejarlo en el centro de la mesa.

Este plato se puede acompañar con una brochetas de verduras y así aprovechamos la plancha que ya está encendida. No dejar que el plato se enfríe, nada más cocinarlo debe comerse.